Nico 03/20

[Nico]

Disfruté muchísimo de mi viaje a la Ciudad de México la semana pasada. La ciudad es muy diferente a lo que esperaba. Me impresionaron los numerosos museos, los varios parques sombreados y la amabilidad de la gente local. 

Estoy muy interesado en visitar lugares históricos. Por eso, lo que más disfruté fue visitar el Castillo de Chapultepec. Su hermosa ubicación en el parque, su arquitectura y su historia me parecen muy impresionantes. Por ejemplo, me sorprendió mucho saber que México fue gobernado brevemente por un emperador Habsburgo de Austria (!). Afortunadamente para el pueblo mexicano, el fue decapitado en 1867.

Otro de mis recuerdos favoritos fue nuestra visita a la zona arqueológica de Teotihuacán en el norte y al Templo Mayor en el centro histórico de la ciudad. Visitar estos lugares fue como viajar en el tiempo. Qué lástima que sepamos tan poco sobre estas civilizaciones antiguas pero muy avanzadas (!).

Para mi cumpleaños, Ezequiel me llevó a un restaurante muy famoso en el barrio Polanco. Este restaurante que tiene dos estrellas Michelin es conocido por su interpretación muy creativa de la cocina mexicana. Entre otros platos muy deliciosos, también probamos zanahorias con hormigas así como un mole que estaba añejado por más de 11 años (!).

Me parece que el único inconveniente de la ciudad es su muy mala calidad del aire, que me provocó náuseas y dolores pulmonares. Afortunadamente, me siento mejor ahora que estamos de vuelta en San Francisco. Sin embargo, espero regresar pronto a CDMX para aprender más sobre esta ciudad tan interesante.