Los beneficios para el cuerpo y la mente de subir escaleras como parte de tu rutina diaria.

[Helen Norris]

¿Hay tal cosa como demasiado ejercicio y cuándo se convierte una buena costumbre en una obsesión? Creo que los cuerpos tienen limites, pero siempre harán las personas que quieren superarlos. Aunque no comparto las ambiciones de los deportistas extremos y no quiero pasar mucho tiempo subiendo y bajando las escaleras, puedo entender la atracción de escalar montaňas, si solamente es para mirar de la cima todo de lo que está abajo, pero también para demostrarme que tengo la resistencia y la fortaleza para llegar al pico. En cambio, la idea de ascender y descender las 15 peldaños de mi casa por 23 horas sin parar como hizo el hombre en este artículo me parece  como un castigo que un pobrecito se encontraría  en el purgatorio. Cuando salga yo del BART y vea las escaleras con muchos escalones al lado de las escaleras mecánicas, siempre me pregunto, "¿cómo prefieres subir hoy y cómo te sienten las rodillas?" Porque creo firmemente en el valor de subir las escaleras siempre que haya la oportunidad y con frecuencia, pero no todas las veces, opto por subir a pie y durante esos viajes a lo alto de las escaleras me siento muy orgullosa de mi misma y trato de no dejarme sentir molestada si un joven corra dos escalones a la vez más allá de mi, que suele ocurrir. Muy al contrario, quiero que eso me incentive acelerar mis pasos . La verdad es  que  creo que si yo fuera tan joven como él o ella,  haría lo mismo. Pero nunca en el pasado ni en el presente me apetecía  bajar las escaleras para repetir la hazaña, como tal vez, quisiera hacer un atleta elite de towerruning.