El sistema de inmigración en los E.E.U.U.

[Lena]

Aunque las leyes de inmigración estadounidenses tienen una reputación para ser generosas, en realidad es muy difícil mudarse a los E.E.U.U. como inmigrante.  Hay pocas maneras de obtener una tarjeta verde, y la mayor parte de personas que quieren venir simplemente no son elegibles, y no se pueden cambiar eso.  Si alguna persona ya tiene parientes ciudadanos o residentes, ellos pueden peticionar para su familiar, pero para mucha gente, el proceso puede tomar hasta diez, quince, o más años.  Y solo es para padres, esposos, niños, y al fondo de la lista, hermanos.  Otras relaciones no cuentan.   Por otra parte, para obtener una visa de trabajo, necesita una formación muy alto, como un titulo universitario o posgrado.  La mayoría de personas que quieren vivir aquí no califican para esas maneras de inmigrar. 

Si uno entra sin autorización, es muy difícil realizar estatus legal, aunque viva en los E.E.U.U. por décadas y tenga familiares ciudadanos y residentes. Si no tiene, o si pierde su estatus legal, puede ser detenido en la cárcel, por tiempo casi ilimitado, sin abogado, sin la posibilidad de hablar con su familia excepto a través de una ventana, y sin el derecho de abrazar sus hijos.  Pero eso no es "castigo" ante los ojos de la ley, porque inmigración es un sistema civil.

Si pierde o no tiene estatus legal de inmigración, la consecuencia es la deportación.  Para mucha gente, esto es un proceso duro y angustioso que separa a los miembros de familias y arruina las vidas de personas trabajadoras.  Aproximadamente ciento de miles de padres de niños ciudadanos son deportados cada año.  Uno cada cinco minutos.  Si uno ha sido deportado, es casi imposible volver legalmente a este país, aún cuando sus niños y toda su familia vivan en los E.E.U.U. 

Si vuelve sin autorización, puede recibir castigo en la prisión federal hasta veinte años por reingreso ilegal.   Este es el delito más enjuiciado en las cortes federales en todo el país.  Este delito, que no tiene víctima, no hace daño a nadie, y es cometido primeramente por inmigrantes volviendo para trabajar y reunirse con sus niños ciudadanos, es perseguido más que todos los otros delitos federales juntos.  Hay compañías de prisiones privadas, con fines de lucro, que son contratadas por el buró de prisiones para encarcelar a estos detenidos, y que han construido cárceles específicamente para encarcelar esos inmigrantes.

Para los indocumentados, la mayoria de los cuales han vivido aquí por más de doce años, la vida diaria es peligrosa.  No pueden obtener licencia para manejar o identificación federal.  No pueden obtener permiso de trabajo oficial, y pueden ser víctimas de empleadores explotadores porque no tienen suficientes derechos de empleo.  No son aptos para participar en los intercambios de seguro medico de Obamacare.  Y en cualquier momento, pueden ser detenidos y separados de los familiares y sus seres queridos, y pueden caer en el ciclo discutido arriba.  Sus opciones son muy bajas.