La clase de Carmen: La tarea 13 diciembre 2018

[Harriet Fotis]

En esta época del año, cuando llueve en el área de la bahía, mis amigos, Linda y Chris, y yo, esperamos que esté nevando en las montañas para que podamos practicar el esquí de fondo. El fin de semana pasado las condiciones fueron perfectas. Hubo mucha nieve nueva, sol brillante y temperaturas frescas pero no frías. (No creo que haya un esquiador en ningún lugar que no quiera este tipo de condiciones). Y así, el viernes, fuimos a las montañas por dos días.

Linda es nueva en el esquí y ella es necesaria que practique en los senderos fáciles. Es mejor dejarla practicar sola, porque nunca va a feliz hasta que domine las técnicas de esquí de fondo (¡y ella puede volverte loco!). Chris es un experimentado esquiador de bajada, pero esta fue la primera vez que estuvo en esquís de fondo. Le sugerí que él practique la escalada en esos largos y delgados esquís antes de esquiar en los senderos montañosos. No hay telesillas. Pero él no cree que pueda ser tan difícil. Así que nos fuimos. Tres horas y doce millas más tarde volvimos. Varias veces durante nuestro viaje fue necesario que Chris caminara arriba por las colinas llevando sus esquís. Le dijo a Linda (en broma) que yo había tratado de matarlo.

Al día siguiente, Chris tomó clases y yo esquié solo. Era muy tranquilo y hermoso, y dondequiera que estuviera en los senderos, las vistas siempre eran fabulosas.